El 11 de septiembre, mientras oraba la Coronilla de las Lágrimas, la Monja Nordestina tuvo una visión de niños siendo encarcelados. Algunos eran arrancados a la fuerza de los brazos de sus padres. Luego, vio a una iglesia blanca con una torre, en la cima de la cual se alzaba una cruz.
Sin entender la visión, continuó rezando. Entonces, en su mente le vino la fecha del 15 de septiembre. Preguntó si se trataba del día de Nuestra Señora de los Dolores. Escuchó como respuesta: “En ese día, caerá una lágrima de Mi Madre sobre la humanidad.” La monja preguntó: “En Brasil también?” Como respuesta, oyó: “No, en Brasil no.”
Siguió rezando y escuchó una locución: “En Bahia¹, habrá un gran dolor por el crimen organizado. En Pernambuco¹, un hombre vencerá un gran mal. En Paraíba¹, brotará una fe muy pura gracias a un obispo.” En ese momento, nuevamente vio a la iglesia blanca y entendió que era un símbolo de esa fe pura.
El 15 de septiembre, una fuerte lluvia inundó a ocho países de Europa y la monja comprendió que a eso se refería la fecha que le fue revelada.
Hay otra revelación anterior, del 12 de junio, que nos puede ayudar a entender ese simbolismo, en la cual la monja vio una fuerte lluvia cuya agua eran lágrimas de Nuestra Señora. Las recientes inundaciones han mostrado, por lo tanto, la tristeza de la Madre de Dios por los pecados de la humanidad.
Muchas personas me piden llevar sus pedidos de oraciones al Padre Oliveira y a la Monja Nordestina. En la noche del 18 de septiembre, en una transmisión en vivo en el canal del Grupo Y´shua, le di como sugerencia a la audiencia que, en oración, entregaran sus intenciones a sus ángeles de la guarda, pidiendo que las llevaran hasta los intercesores, sin necesidad de pasar por mí. Varios místicos recibían oraciones de esa manera a lo largo de la historia.
El 20 de septiembre, mientras rezaba, la Monja Nordestina, que no había visto el programa, tuvo una visión en que había una cola de personas acercándose a ella. Todas estaban con sus ángeles de la guarda. Los ángeles le entregaban los pedidos de oración de cada persona. La primera de la fila era una madre, que mostraba a una niña enferma. La monja se sintió muy conmovida por la visión.
Oremos por los niños, por el mundo y por Brasil, confiando en el poderoso auxilio de nuestro ángel de la guarda.
¹ Bahia, Pernambuco y Paraíba son estados del nordeste de Brasil.
Traducido por: Katia Nogueira
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